“…el avión despega contra el viento, no a favor de él”

Resiliencia-Emocional

La manera en la que yo abordo la resiliencia emocional es desde un lugar preventivo. ¿Qué es la resiliencia emocional? En términos prácticos, ¿alguna vez has estirado un caucho sólo para ver cuanto aguanta antes de romperse?  A veces con gran sorpresa el caucho estiraba y estiraba sin romperse y otras veces nos machucamos porque se rompió antes de lo previsto.

 

Coloquialmente, la resiliencia es cuánto se estira nuestro caucho antes de romperse. Ahora, esto no significa que uno nació con una “calidad” de caucho y está uno destinado a su capacidad de estiramiento. La buena noticia es que hay muchísimas cosas que uno puede hacer para que el caucho sea mucho más resistente y tenga mayor flexibilidad. 

 

Por mucho que me resista a simplificar la exploración personal he identificado tres pasos en el proceso de desarrollar la resiliencia emocional que aplican a todos:

  1. Interiorizar que la adversidad no es cuestión de si pasa, sino de cuándo pasa. 

  2. Identificar y hacer uso de nuestros recursos internos y externos. 
  3. Involucrar las prácticas y actividades que reconocemos como nuestras vitaminas emocionales en nuestra vida diaria. 

Creo que es importantísimo entender que lo que cada uno entiende como adversidad es absolutamente personal, lo que para mí funciona como recurso interno, de pronto para ti no y finalmente mi multivitamínico emocional y su dosis tiene una composición muy diferente a la tuya. 


En este proceso, como es de esperarse conmigo, también hay que hacer la tarea y hace parte de la profunda exploración personal que invito a que todos hagamos. 

Llibert Losada

@happierhun